- ¿Has sentido querer “golpear al otro/a” en medio de un conflicto percibido como muy intenso? Si, como respuesta a sentimientos como la frustración o el enojo.
- ¿Has sentido querer “salir corriendo” en medio de un conflicto como muy intenso? Sí, como respuesta a intentar evitar un malestar o un desgaste mayor.
- ¿En qué lugar del cuerpo sentís las sensaciones que te producen los conflictos? En la boca del estómago y en la cabeza.